Mario Román no deja títere con cabeza en Perú

Han sido tres días de carrera, que han discurrido por las inmediaciones de San Bartolo y que daban comienzo con la disputa de una carrera en la playa, para continuar con una prueba prólogo y ya el evento final, de verdadero «hard enduro» pero con navegación.

“En la playa de Santa María, un lugar increíble y con presencia de mucho público, nos marcaron para la primera jornada una crono y allí pude ganar tanto la clasificatoria como la semifinal y la final”, dijo Mario Román.

“La prólogo, al día siguiente, consistía, ni más ni menos, que en una carrera de superenduro y comencé ganando la sesión de vueltas rápidas, aunque luego en las mangas no tuve buenas salidas, costaba mucho adelantar y decidí no arriesgar, acabando segundo en la final, a espaldas del británico Jonathan Richardson”.

“El enduro extremo llegaba el tercer día y se trataba de cubrir un recorrido de cien kilómetros, dividido en cuatro sectores. Si conseguías terminar el primero de ellos, te asegurabas, por así decirlo, la medalla de bronce. Después venían dos más que te daban acceso a la plata, para sumarse luego el tramo final -30 km.- que, caso de completarlo, te hacía acreedor al oro. Fui el único en lograrlo, aunque Salsench también llegó a meta, pero ya fuera de tiempo. Él y el chileno Camilo Herrera me acompañarían en el podio”.

“Hizo mucho calor, hubo que aplicarse con la navegación, y me divertí mucho, sintiéndome realmente a gusto con la 300 SE Factory que Sherco Perú puso a mi disposición y que me mantuvieron siempre en perfecto estado. Ahora regreso a casa, aunque solo un día después vuelvo a subirme a un avión, en esta ocasión, para viajar a Texas, donde correré, por vez primera y junto a mi compañero de equipo Wade Young, el Kenda Rev Limiter Extreme Enduro, puntuable para el Campeonato AMA de Enduro Extremo”, concluyó el campeón.