Cuando eres mujer y vas en moto, aunque no lo quieras, eres objetivo de algunos comentarios que, realmente, no vienen a cuento. Y son originados, la mayoría de las veces, por mentes estancadas en épocas pasadas. De hecho, la mayoría de las personas que realizan ese tipo de preguntas no son, ni tan siquiera, moteros. Pero, seamos realistas. A una mujer motera hay que realizarle las mismas preguntas que le haríais a un amigo motero. A un chico no le preguntáis si esa moto es muy alta para él, no. De hecho, cuanto más difícil sea la moto para él, físicamente hablando, más mérito tiene. Y con las mujeres pasa exactamente igual.
Por eso, como no queremos que sin querer caigáis en la tentación de decir algún tipo de comentario desafortunado, aquí os dejamos una lista de las cosas que no se deben decir a una mujer motera y os instruimos en aquellas que, teniendo el mismo significado, no son ofensivas.
¿Es tu moto?
No son pocas las personas que se sorprenden al ver a una mujer con una moto de media y gran cilindrada. De hecho, a la mayoría de moteras nos han preguntado, como mínimo una vez en nuestra vida, si esa moto es o no es nuestra o, simplemente, han dado por hecho que esa 500 es de nuestra pareja. Para evitar estos malentendidos, en vez de preguntar sorprendidos si es nuestra moto, es mejor hacer preguntas del estilo de: ¿Qué tal va la moto? ¿Cuánto tiempo llevas con ella?
¿No es muy alta para ti?
Otra de las frases típicas tiene que ver con la altura de la moto y de la motera. Yo, al principio, admiraba a aquellas moteras que son capaces de manejar perfectamente una moto muy alta. Con el tiempo, esa admiración no ha cesado, pero me he dado cuenta de que la confianza lo es todo y que unos buenos trucos y una buena técnica hacen el resto. Por este motivo debes evitar preguntar si esa moto es muy alta. Es más efectivo y menos ofensivo realizar preguntas como: ¿Qué tal te apañas con la moto? ¿Cómo haces para llegar al suelo con ella? Este tipo de preguntas en vez de llamar bajitas a las moteras muestran interés sobre el modo en el que superan la barrera de la altura.
¿No pesa mucho para ti?
Otro de los handicaps es el peso de las motos. Y tenéis que tener clara una cosa: todas las motos pesan. Algunas más, otras menos, pero todas pesan. Y sí, hay personas muy fuertes que pueden con ellas sin problemas. Pero hay otras, más menuditas, que son conscientes de sus limitaciones y saben que deben emplear más maña que fuerza para mover las motos, aunque sea en parado. Por este motivo preguntas como "¿No pesa mucho para ti?" son tan obvias que no hace falta decirlas. Como comentaba, somos conscientes de que pesan. Es mejor interesarse por la manera en la que la mujer (o el hombre) libran con el peso de esa moto o, simplemente, ofrecer tu ayuda de manera desinteresada.
¿No es mucha moto para ti?
Esta es otra de las frases que nunca dirían a un hombre motero pero que las mujeres hemos llegado a sufrir en algún momento. Sabemos que muchos no están acostumbrados a ver mujeres en motos de gran cilindrada, aunque esos son los mismos que siguen pensando que una R6 se puede limitar para el A2… Cuando veáis a una mujer con una Honda CBR 600 RR, con una Yamaha R1… Que no os corroa la envidia insana. En vez de preguntar si esa mujer tiene la técnica suficiente para llevar esa moto, mejor interesaros por cómo fue el cambio de una moto inferior a una con tanta potencia, cuánto tiempo llevan con ella…
Si os fijáis, hay algo que está presente en la mayoría de los comentarios. Y sí, si os dais cuenta, las opciones correctas que os ofrecemos en este artículo son exactamente las mismas preguntas que le haríais a un amigo en esa misma situación. Por lo que cuando vayáis a decir algo a una motera, preguntaos por dentro: ¿cómo le haría esta pregunta a un motero desconocido en plena Cruz Verde? Hallaréis la respuesta.
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